En el Departamento de Tarija, la preocupación por el manejo apropiado y la preservación de las aguas subterráneas es un tema transcendental. Las políticas de explotación de las aguas subterráneas como complemento de los recursos hídricos superficiales son frecuentemente basadas en planificaciones de corto plazo y pueden no ser sostenibles en el tiempo, estas políticas son elaboradas para atender la demanda de agua para diversos usos (abastecimiento público, industrias, irrigación, etc.). Por ello, es necesario integrar y planificar el aprovechamiento de los recursos hídricos subterráneos contemplando los aspectos técnicos, legales y operativos en la planificación para el uso racional de las fuentes de agua subterránea. En la actualidad, se presenta un proceso de degradación y perdidas de zonas de recarga hídrica producto de actividades antrópicas que traen como resultado el aumento de los niveles de erosión, compactación, deforestación y degradación. Esto da como resultado la disminución en la cobertura vegetal, la infiltración del agua, aumento de la escorrentía superficial y disminución en la cantidad y calidad del agua que recargaban los acuíferos subterráneos que abastecen del vital líquido a las comunidades de la parte alta y media de la cuenca.